El desglose de las ocupaciones por actividad económica muestra que la población migrante se concentra en las actividades de comercio (31,5%), actividades de los hogares (8,9%), hoteles y restaurantes (8,7%), construcción (8%), industria manufacturera (6,3%), otras actividades de servicio (5,9%), actividades profesionales y científicas (4,1%) y actividades administrativas (3,6%). Estas ocho actividades agrupan el 77% de los ocupados migrantes. El resto de actividades cuenta con el 23% de los ocupados no nacionales. Se trata de actividades que se destacan por su rápido crecimiento: la construcción cuenta con un incremento promedio anual de 12,3% y las actividades de los hogares con un 10,2%. (OIT, 2016: p29).
Desde el año 2000, la tasa de desempleo en panamá empezó a reducir drásticamente por su desarrollo económico y política de puertas abiertas, del 14% en 2000 a solo 4% en 2014. (Banco Mundial, 2017).
“Si bien los colombianos “están segregados en todos los sectores, tienen una mayor participación en las áreas del comercio, la construcción y la manufactura”, en tanto que la población de Nicaragua presenta una alta tasa de participación en el servicio doméstico y la agricultura, la china por el comercio, hoteles y restaurantes, los venezolanos, costarricenses y peruanos participan en diferentes sectores, “…sin embargo, el comercio sigue siendo el ámbito en el que se agrupa mayor cantidad de personas de estos países…”(DPN-OIM, 2016)
Obtener ingresos económicos, en una economía dolarizada, es uno de los principales atractivos para la migración en Panamá (DPN-OIM, 2016)
El Gobierno de Panamá no ha aceptado la ratificación de la Convención Internacional sobre la Protección de los Derechos de los Trabajadores Migratorios y sus Familias, ante el Examen Periódico Universal (EPU) de la ONU el 13 de mayo de 2015. (García,E. 13/05/2015)
La mayor parte de los trabajadores migrantes son temporales lo que fomenta la precariedad laboral. Se registran actitudes abusivas dentro de los puestos de los trabajadores de la construcción, como la supervisión mediante un “timekepper” en caso de que excedan su hora de salida y sean sujetos a pago de horas extras, ese método funciona a través de una persona asignada para vigilar y custodiar el trabajo. Además, el 62% de la población migrante encuestada para la Elaboración propia en base de los datos de las encuestas de CID-Gallup en Panamá, afirma que sienten riesgo en sus condiciones de trabajo (OIM, 2013).
En el tema de los maltratos en el lugar de trabajo, es esencial enfatizar la situación de las mujeres, especialmente en hogares, ya que, en algunos casos, afirmaron haber sido víctimas de hostigamiento sexual. (OIT, 2016: p29)
Fuente: Organización Internacional del Trabajo Oficina Regional de América Latina y el caribe en base a proceso especial de encuesta de hogares.